Qué importante es que la ciudadanía se vea
identificada y reflejada con quienes integran el gobierno, qué importante es
sentir que forman parte de nuestra cotidianidad y que podemos acercarnos con
ellos y hablar de lo que nos afecta, de lo que nos hace falta y de lo que no
nos gusta, qué importante es tener una buena comunicación entre los gobernantes
y sus gobernados.
En Ocotlán esta comunicación es prácticamente
inexistente, el gobierno municipal de esta administración, encabezada por
Enrique Robledo Sahagún, se ha encargado de cortar ese lazo esencial que une al
pueblo con el gobierno; muestra de ello fue lo que sucedió el pasado jueves 19
de marzo, que ante un tiroteo histórico en el municipio y en Jalisco, el
alcalde guardó silencio.
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| Foto: Jessica Padilla |
Tuvieron que pasar 14 horas para que Enrique
Robledo en un tibio comunicado a través de su cuenta de Facebook replicara el
boletín que la Policía Federal ya había dado a conocer horas antes, una cifra preliminar
que anunció el número de personas fallecidas, donde destacan tres jóvenes que
nada tuvieron que ver con el enfrentamiento, según el análisis de las propias
autoridades.
Después, como si nada hubiera pasado, el
alcalde, junto al director de la policía municipal, Diego Cervantes Maldonado,
celebraron honores a la bandera el 21 de marzo, para conmemorar el natalicio de
Benito Juárez, así, sin un pronunciamiento, sin un comentario, sin un discurso
y sin una palabra de aliento para los familiares de las víctimas del fuego
cruzado.
La única entrevista que dio Enrique Robledo fue
para un medio de la ciudad de Guadalajara, ahí dijo que lo sucedido en Ocotlán fue “un hecho
aislado como los que suceden en otros municipios del país” (respiro). Ante
tales declaraciones, medios estatales, locales y nacionales han buscado al
alcalde para indagar más al respecto, a ninguno lo ha recibido, dicen en la
oficina de Comunicación Social que el presidente municipal ya no dará
entrevistas sobre este tema, porque 'ya habló con Televisa' y eso, (por lo menos
para él) es suficiente.
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| Foto: Jessica Padilla |
Esta grave falta de comunicación ha derivado en
un fenómeno digno de análisis, una psicosis colectiva digital, en donde
cualquier movilización policíaca o medida preventiva, por pequeña que esta sea,
es motivo para que la ciudadanía sugiera que otro tiroteo está sucediendo en Ocotlán
o incluso que las garantías individuales de los ocotlenses serían suspendidas
por un supuesto “toque de queda” que alguien comenzó a esparcir por las redes
sociales y que se prendió como pólvora.
Mientras las autoridades estatales y federales
se ocupan de investigar los hechos del pasado 19 de marzo y procurar la
seguridad en Ocotlán, el alcalde Enrique Robledo y su equipo de comunicación,
si es que lo tiene, deberían estar construyendo un plan de medios que erradique
por completo los rumores entre sus gobernados, el rumor, ese gran enemigo de
cualquiera que se ostente como un buen político.
EL PLUS: Los ciudadanos organizados de Ocotlán,
convocan a una marcha pacífica para el próximo sábado 28 de marzo a las 9:30 AM,
con el mismo recorrido de la Entrada de los Gremios, donde exigirán a las autoridades federales,
estatales y municipales, paz y tranquilidad para sus calles. Aquí más info:
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