La psicosis de un matricida



Es triste cuando una madre tiene que pronunciar las palabras que condenan a su propio hijo, pero no podía permitir que creyesen que yo pude matar a nadie. 

Ahora lo encerrarán, como debía haber hecho yo hace años. 

Siempre fue malo, y él les iba a decir que yo maté a las chicas y al hombre. Como si yo pudiera hacer algo más aparte de estar sentada y mirar, como uno de esos pájaros disecados. 

Saben que ni siquiera puedo mover un dedo y no lo haré. Me quedaré aquí sentada y calladita, por si acaso sospechan de mi. Seguramente me estarán mirando ahora, bueno, que miren. Que vean que tipo de persona soy. 

No voy a darle un manotazo a la mosca. Espero que me estén mirando. Que lo vean. Lo verán y se darán cuenta y dirán: "Ella no le haría daño ni a una mosca".

Anthony Perkins en Psycho de Alfred Hitchcock. 1960.

Comentarios